EVALUACIÓN II
En el anterior post de evaluación os había hablado de cuales eran, en mi opinión, los sobresalientes de este curso, pero no todas las series llegan al sobresaliente también hay otras notas e, incluso, algún que otro suspenso.
Empecemos con la parte negativa, en este caso muy negativa puesto que, para mi, ha sido más bien un ENORME bluff, me refiero a la serie Marvel's Agents of SHIELD. Con el precedente de las películas de los superhéroes de la factoría Marvel quizás las expectativas sobre ella, estaban un poco altas. Esas expectativas se vieron reflejadas en las altas audiencias de su estreno, lo que hizo que la cadena encargase la temporada completa y renovase para una segunda. Lo malo es que estas audiencias no hicieron más que caer, teniendo un pequeño repunte en la segunda parte de la temporada gracias a los guiños entre la serie y los estrenos de Thor: El mundo oscuro y Capitan América: El soldado de invierno. Aún así la serie se les ha quedado sosa y sin gracia teniendo potencial y soporte como para conformar un producto final muy interesante. Espero que hayan tomado nota los guionistas y mejoren las tramas en la segunda temporada porque si no está condenada a la cancelación.
Otra de las novedades de la temporada ha sido Sleepy Hollow. Esta serie recoge la leyenda de la película de Johnny Deep y Tim Burton y le da una vuelta de tuerca a la historia de este jinete sin cabeza. Además del despertar del jinete, en el primer episodio vivimos el despertar de Ichabod Crane (Tom Mison) soldado del ejército colonial que, sin saberlo, hace 230 años mezcló su sangre con la del jinete y eso hace que, cuando el jinete despierta, él también lo haga. Cuando Ichabod es encontrado vagando por el pueblo lo entregan a la policía y allí conocerá a su futura compañera en su difícil misión, la Lt. Abigail "Abbie" Mills (Nicole Beharie). La química entre estos dos personajes que llevan el peso de la serie es muy especial y sus discusiones, a veces, rebajan el tono dramático de la serie al introducir una nota de humor. Creo que no hace falta decir que esta serie entra en el grupo de las que si me han gustado, ha sido una sorpresa muy positiva. Yo recomendaría que la vieseis en VO porque merece la pena que escuchéis la voz y la manera de hablar de Tom Mison.
Este año también ha supuesto la temporada de consolidación de Arrow, The Following, Elementary y Nashville que entraban en su segunda temporada precedida del éxito de la primera.
Empecemos con Arrow (a la que ya había dedicado una entrada del blog). En la primera temporada ya nos han presentado al personaje, sus aliados y a alguno de sus enemigos, varios de los cuales creíamos muertos y, sin embargo, reaparecen en esta segunda temporada. Es por todo esto que la serie ha crecido, no se ha quedado estancada repitiendo aquello que había funcionado en la primera temporada y han ido a más. Han introducido nuevos personajes que funcionan muy bien (tanto así que tienen ya su propio spin-off en The Flash) y la tercera temporada se presenta muy interesante porque el público sabe cosas que Oliver Quenn/Arrow (Stephen Amell) todavía no sabe y va a ser muy interesante ver ver como, cuando y donde las averigua.
En esta segunda temporada han hecho fijo el personaje de Felicity (Emily Bett Rickards) que ha pasado de trabajar en Queen Industries a ser una pieza imprescindible en el equipo de Arrow y nos regala a los espectadores momentos de gran comicidad, además de ser el "Pepito grillo" en la oreja de Oliver haciendo que se cuestione sus decisiones y no actúe de modo impulsivo.
También se ha estrenado la segunda temporada de The Following, serie creada por Kevin Williamson y Marcos siega (co-creador y director del episodio piloto de The Vampire Diaries respectivamente) que se introduce en el mundo de las sectas. Lo que pasa es que esta secta o grupo no es de esas de suicidios en masa sino que creen que lo mejor es ir por ahí matando gente en nombre de Edgar Allan Poe. La primera temporada comienza con Joe Carroll (James Purefoy) en la cárcel condenado por asesinar a 14 chicas en 2003, el agente del FBI que lo capturó Ryan Hardy (Kevin Bacon) no ha estado en activo desde entonces pero cuando empiezan a aparecer cuerpos asesinados con el mismo "modus operandi" todas las sospechas recaen en Joe Carroll aunque esté en prisión. Este hombre ha sido lo suficientemente inteligente como para hacerse con lo que él llama "amigos" que continuarán con su "obra" y le ayudarán a escapar.
La serie tiene un comienzo muy prometedor y unas interpretaciones muy buenas, pero en su segunda temporada creo que se les ha ido un poco de las manos, centrando la acción en una nueva secta que imita el modo de operar de Carroll, convencidos de que sigue vivo y con esos homenajes él vendrá a ellos. Esta temporada incluye mucha mas sangre y una sucesión de escenas muy desasosegantes e inquietantes. Lo que más me ha gustado es la interpretación de Shawn Ashmore, el agente Mike Weston, que sobrevive a la primera temporada y en esta segunda tiene mas peso en la trama y el actor ha sabido navegar por todo el arco de emociones por el que los guionistas llevan a su personaje que no son pocos.
Elementary supuso la adaptación americana de esa modernización de Sherlock Holmes que ya había hecho la BBC inglesa. Esta serie cuenta con Jonny Lee Miller en el papel de Sherlock y Luci Liu como Joan Watson. Evidentemente tanto el cambio de sexo del compañero de aventuras de Holmes, como el por qué llega su vida está bastante alejado de lo que Sir Arthur Conan Doyle ideó. Es por esto que, una vez hemos pasado por alto todo esto (o nos hemos acostumbrado), la serie consigue atraparte, no del modo que lo hace el Sherlock de Benedict Cumberbatch (pero es que lo de Benedict es otra liga, tanto la serie como su interpretación) pero si puedo decir que es una serie de corte policíaco bastante aceptable.
En su segunda temporada la serie explora la relación de Sherlock con su hermano Mycroft (Rhys Ifans) y el cambio de rol de Joan en su vida. El trabajo de Joan consiste en ser un acompañante o ayudante para personas en proceso de rehabilitación que deben volver a su vida diaria después de estar en una clínica de desintoxicación, todo ese proceso ha terminado pero Joan se queda tan fascinada con todo lo que es y cómo es Sherlock que quiere aprender y ayudarle a resolver crímenes, se convierte en algo así como su aprendiz. En la segunda temporada también aparece por primera vez Lestrade (Sean Pertwee) y atisbamos el pasado de Sherlock en Londres antes de tener que mudarse a Nueva York y empezar a colaborar con la policía de NY a las órdenes del Capitán Gregson (Aidan Queen).
Por último tenemos la serie Nashville. Su nombre no engaña a nadie, la trama se desarrolla casi por completo en esta ciudad y en los míticos decorados considerados casi sagrados en los círculos de la música country. Esta música se convierte poco a poco casi en un personaje más de la serie, en la que encontramos cantantes de éxito como Rayna James (Connie Britton) y otras como Juliette Barnes (Hayden Panettiere) que tiene el éxito pero quiere hacerse con el respeto de la industria. En la primera temporada estas dos mujeres se han enfrentado duramente, pero la segunda temporada les ha llevado de sus peleas de gatas a hacer piña contra un enemigo común. Además de esto sus vidas sentimentales están patas arriba y, lo más curioso, es que cuando creíamos que todo estaba volviendo a encajar el final de temporada nos vuelve a dejar con el Jesús en la boca y con la incertidumbre de qué es lo que va a pasar ahora.
Por su papel de Juliette, Hayden Panettiere ha sido nominada a los premios Emmy y, la verdad, creo que debería volver a estarlo porque su personaje ha pasado por una auténtica montaña rusa y ella ha sabido darle la credibilidad necesaria en cada momento. Sólo diré que su última escena con Avery (Jonathan Jackson) en el capítulo final de la temporada es genial, los dos consiguen llegar al espectador con sus interpretaciones de un modo muy especial.
Además de todas estas series también encontramos series de largo recorrido, algunas llevan una década en activo pero vuelven en otoño como cada año con la caída de la hoja. Me refiero a Anatomía de Grey, Bones, Castle y El Mentalista.
La décima temporada de Anatomía de Grey ha estado marcada por el adiós de Sandra Oh a la serie y la curiosidad que despertaba el cómo desaparecería Cristina Yang de la serie, conociendo además el gusto de Shonda Rhimes (creadora de la serie) por cerrar casi cada temporada con algún evento traumático (accidente de avión, bomba en el hospital, un hombre armado en el hospital dispuesto a matar a todo el que lleve puesta una bata blanca...). Esta temporada no ha sido así, aunque el final de temporada si ha sido triste al saber que este personaje no va a volver, aunque sí me gustó el modo de hacerlo puesto que es muy acorde con el personaje, digamos que emigra a un lugar mejor para lo que ella considera importante.
Bones ha completado este año su novena temporada y, siendo una serie con trama y tono muy definido, consigue dejarte cada temporada con la sensación de que te ha dado algo nuevo, mérito de los guionistas y gran acierto al hacer fijo al personaje del psicólogo Sweets y la rotación de los ayudantes de la doctora, cada uno más particular que el anterior.
Castle ha alcanzado su sexta temporada y ahora cada una se antoja más difícil que la anterior porque históricamente cuando en una serie se resuelve la química sexual es como si los guionistas no supiesen trabajar y, una de dos, o introducen el tercer vértice de un triángulo amoroso o les hacen romper y reconciliarse hasta que los seguidores de la serie nos aburrimos. Los guionistas de Castle han sabido navegar por esta nueva situación de sus protagonistas sin perder el espíritu de la serie y se agradece mucho. Lo que no se agradece es la incógnita con la que nos han dejado todo el verano, eso no.
Por último, aunque no menos importnte, tenemos El Mentalista. En Septiembre llegará a su séptima temporada, pero en lo que se refiere a esta sólo diré dos cosas: POR FIN!!!! y con todos los cambios que se introdujeron en esta temporada uno podría pensar que la serie está condenada a la cancelación pero la recta final que han creado hace que todos los que seguimos la serie tengamos mucha curiosidad por ver cómo se va a introducir este nuevo cambio y cómo se va a desarrollar esta nueva dinámica.
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