Bien, aun a riesgo de ser repetitiva voy a volver a
hablar un poco de lo mismo, de esos placeres inconfesables, ya sabemos que todo
el mundo ve los documentales de la 2 aunque la audiencia se la lleve sálvame,
casi casi es este un fenómeno digno de estudio por Iker Jimenez.
En el último post hablaba de Teen Wolf como uno de
mis placeres inconfesables, perderme en Beacon Hills una vez a la semana es un
gustazo. Los capítulos se hacen cortos, no hay ningún personaje que sobre y los
personajes adultos no están incluidos como por error, sino que tienen
importancia todos ellos, desde los padres de los chic@s al entrenador del
equipo de lacrosse al que amamos odiar y el que forma junto con Stiles el dúo
cómico más fuerte de la serie. El instituto también es importante, es decir,
los chicos van a clase, no es como en otras series que, cuando llega la
graduación, no entiendes cómo es posible porque no van a clase nunca (en The
Vampire Diaries pasa esto, los actores incluso hacen broma de ello).
La estética y el tono también son muy buenos, no es
demasiado oscura ni demasiado seria, de hecho creo que ese es otro de los
puntos a su favor, que no se toma en serio a si misma y los guiones mezclan
drama, humor y acción con mucho tino.
Creo que todo esto se consigue en parte gracias a
estar formada por un cast que, genuinamente, se lleva bien y eso traspasa la
pantalla aunque parezca que no es asi.
Queda evidente que soy una fan entregada a este
pecadillo pero no es el único, hay muchos mas…..
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