Este término apareció por primera vez en el diario The New York Times en 1980. El término es aplicable a música, series, películas,... todo aquello que nos atrae y disfrutamos, pero, a la vez, nos provoca una cierta vergüenza, no nos atrevemos a admitir que nos gusta, de ahí su nombre: "placer culpable".
Lucía Taboada en una entrevista en el programa "La Script" de la Cadena Ser, nos resume en un decálogo alguna de las características que deben cumplir las series que vemos para que entren en la categoría de "placer culpable":
1.- Las series creadas o producidas por Shonda Rhimes entran todas en la categoría de Guilty pleasures.
En esta foto tenemos a la mismísima Shonda con "sus chicas": Meredith Grey (Ellen Pompeo, "Anatomía de Grey"), Olivia Pope (Kerry Washington, "Scandal") y Annalise Keating (Viola Davis, "How to get away with Murder").
2.- Tramas irrealmente intensas. Los personajes se ven involucrados en situaciones irreales.
One Tree Hill sería un ejemplo perfecto de este mandamiento: hijos legítimos y bastardos, intentos de asesinato, niñeras psicópatas, chantajes, chicos que casi no van al instituto y se gradúan pero, sobre todo, dentro de este mundo irreal de One Tree Hill, también había mucho amor a la música y el baloncesto.
3.- Diálogos extremadamente intensos. En la vida diaria, nadie se expresa usando grandes metáforas o haciendo grandilocuentes discursos como quien da los buenos días.
La forma de hablar de los chicos de la serie Dawson Crece era cualquier cosa menos normal, el uso de grandes metáforas, grandes discursos,... era constante pero uno acaba por acostumbrarse, o lo quieres o lo odias (jeje) no hay término medio.
4.- Tramas amorosas. Haciendo cálculos, al menos, 6 personajes de una de estas series tienen relaciones entre ellos.
El hospital en el que "viven" los personajes de Anatomía de Grey es testigo de los amoríos entre los doctores de los distintos departamentos. La trama amorosa de este hospital es, a veces, más difícil de seguir que la de Al Salir de Clase.
5.- Tensión sexual no resuelta entre dos personajes desde el primer episodio de la serie.
Felicity y Ben... desde que él firmó su anuario en la primera escena de la serie... Sus vidas no serán lo mismo y, a lo largo de las 4 temporadas de Felicity, habrá momentos en los que él se arrepiente de haberlo hecho, pero todo sea por el final feliz de cuento.
6.- Debemos llorar, al menos, una vez por temporada. Graves enfermedades, muertes trágicas, rupturas dramáticas,...
Cinco hermanos conmigo ha cumplido la norma sin problema, creo que incluso más de una vez por temporada. Sally Field (Nora, la matriarca del clan Walker) y Dave Annable (Justin, el menor de los hermanos) conseguían con sus tramas sacarme la lagrimita...
7.- Uso de temas rompedores o diferentes a cualquier otra serie. El ejemplo más claro es el de Sexo en Nueva York porque nunca antes se había hablado de sexo de ese modo tan abierto.
8.- Amigas o enemigas se dan de tortas.
9.- De vez en cuando vemos un número musical que no viene a cuento.
En la foto está Jennifer Love Hewitt que en The Client List, no le basta ser productora y protagonista que se arrancó a cantar en uno de los episodios sin venir muy a cuento.
10.- Alguno de los personajes sufre un grave accidente y acaba con amnesia. Si la serie se vuelve tan loca que no sabemos por donde va a salir o seguir adelante, siempre podemos recurrir a que todo fue "un sueño de Resines".
